Cirugía Láser para Glaucoma, Retinopatía Diabética, Desprendimiento Retina

La cirugía láser se utiliza también para corregir otra serie de enfermedades oculares como puede ser la retinopatía, el glaucoma o el desprendimiento de retina. A continuación vamos a explicar en qué consiste cada uno de estos. 

• Retinopatía diabética. Se trata de una enfermedad que provoca pérdida de visión o problemas en la visión. Es una enfermedad ocular que pueden padecer las personas con diabetes. Aparece debido a hemorragias internas en la retina. Puede ser tratada con cirugía láser. Con este tipo de cirugía se puede evitar que la enfermedad continúe avanzando, pero no se puede revertir el daño que ya ha provocado. Se trata de una enfermedad ocular bastante severa, que si no es atendida a tiempo, puede incluso llegar a provocar la pérdida total de la visión. Si usted tiene diabetes es importante estar atento para evitar que se desarrolle esta enfermedad, ya que si se detecta al principio, no suele presentar síntomas.

• Glaucoma. Se trata de una enfermedad ocular provocada por el aumento de la presión en el ojo, lo cual afecta al nervio óptico, dificultando la visión. El glaucoma no puede ser curado pero sí se puede evitar que continúe avanzando mediante el uso de cirugía láser. Es conveniente estar atento a posibles problemas en la visión y visitar con periodicidad al oftalmólogo para evitar que se desarrollen este tipo de enfermedades. Y en caso de que se haya desarrollado, tratarla cuanto antes.

• Desprendimiento de retina. La retina es el lugar en el que se recibe la luz (el lugar en el que se enfoca la imagen) que será transformada en imágenes. Se trata de una pequeña capa de células nerviosas. En algunos casos puede ocurrir que esta pequeña capa se desprenda. Cuando esto ocurre, se pierde cierto campo de visión. Si no se atiende, es una enfermedad ocular que puede seguir avanzando. Puede ocurrir por diversos motivos, ya sea por defectos congénitos e incluso hasta por un golpe fuerte en el ojo. El desprendimiento de retina puede ser tratado con cirugía láser, e incluso también se puede evitar si se detecta un desgarro o agujero en la retina a tiempo.